“TÚ SERÁS LUZ.”
“Y Dios dijo: “Que se haga la luz”, y la luz se hizo. Y Dios vio que la luz era buena. Y Dios separó la luz de la oscuridad. Dios llamó a la luz Día, y a la oscuridad Noche. Y hubo noche y hubo mañana, el primer día.” [Genesis 1:3-5]
Ajustador del Pensamiento: “La aparición de la luz era una prioridad absoluta: ocurrió el primer día. Proporcionar buena iluminación era una necesidad para que el Padre facilitara la etapa de co-creación. ¡Qué sabia es Su previsión!
El punto que me gustaría destacar es que, como un puro Fragmento de Su ser, Yo soy una micro versión del gran Yo Soy. Él tuvo que enviar una partícula de Sí mismo para fertilizar tu mente, sin alterar Su don de dotes de personalidad, e infringir tus libertades personales.
Yo soy Su paradisíaco Embajador abordo y te he elegido a ti como la sede de Mi santa embajada. ¿Tú respetas Mis privilegios diplomáticos, o tu ego rebelde organiza tontamente golpe tras golpe para perturbar el correcto orden divino de tu existencia?
Tu Progenitor nunca está malhumorado. Etiquetarlo como inestable es una proyección equivocada de tu inmadurez emocional en su disposición siempre alegre. La estabilidad en medio del aparente caos es el anclaje de su multiverso en constante expansión. Su luminiscencia infunde Todo Lo Que Es, recreando ad infinitum los patrones de perfección de todas Sus exaltadas empresas.
¿Y tú? ¿Aprecias mi influencia fortalecedora, o atenúas Mi reconfortante luz del techo, fijándote en las áreas de sombra de tu vida? ¿Desvías tu visión interna de la iluminación interior divinamente diseñada para disipar toda oscuridad si tan solo la dejaras hacer su magia?
¡Un cambio en la actitud cambiaría las reglas del juego! Ciertamente requiere práctica y perseverancia encontrar el punto de inflexión donde se vuelva habitual para ti aprovechar el voltaje inagotable de Mi iluminada e iluminadora presencia.
¿Por qué no comenzar hoy a reformar tu forma de pensar, sentir, y hacer, respondiendo a tu sublime llamado de transformarte en una vibrante partícula de luz cuya contribución se sume al campo de luz divino; contribuyendo así a importantes mejoras planetarias? Cuando el Padre dice: “Tú serás luz” ¡Él te está hablando a TI! ¿Cómo respondes a tan majestuosa llamada al deber?
Traducido por Silvia Adriana Cohane.
