“ACERCA DE ARISTÓCRATAS ACREDITADOS.”
“[Jesús] no prestaba ninguna atención a la opinión pública y no le influían los elogios. Rara vez se paró a corregir malentendidos o protestar ante falsedades. Nunca pidió consejo a nadie; nunca solicitó oraciones. [LU 141:7.12] … no parecía sorprenderse casi nunca. Nunca se mostró excitado, molesto ni desconcertado. […]. A veces estaba triste, pero nunca desanimado.” [LU 141:7.13]
Ajustador de Pensamiento: “Jesús era un genuino Maestro en semejanza a Dios, en palabras y conducta. Su vida fue desprovista de muchos conflictos que plagan a aquellos que son mucho espectáculo, pero sin substancia, una razón significativa para la rampante confusión espiritual en vuestro mundo.
Cuando Él experimentaba tiempos desafiantes, siempre acudía a su “Padre celestial.” Sin apoyarse al 100% en Su guía experta, el nunca habría tenido éxito en poner una fundación sólida como roca para el reino terrestre del Cielo, algo que ningún humano había alcanzado en sus méritos.
Si te apasiona hacer la voluntad del Padre, no desperdiciarás tiempo o fuerza vital en agotar interacciones. Jesús encontró que la mejor manera de avanzar era conservar la calma y estar sereno cuando se estaba expuesto a los comportamientos humanos defectuosos.
Su lealtad sin división era para con el negocio del Padre. Fue como infundió la gracia salvadora en los asuntos humanos. Para aquellos quienes dedican sus vidas al servicio elevado, todas las demás cosas caen en su lugar, pues están “en el flujo.”
Jesús estaba muy consciente que las intensas emociones humanas podían convertirse en agentes de desequilibrio. Él permaneció emocionalmente alerta, sabiamente permaneciendo lejos de las complejas vías de las traumáticas montañas rusas emocionales, las cuales no son el camino más fácil o rápido para llegar de manera segura del punto A al punto B.
Acércate cada día con la intención sincera de implementar las herramientas prácticas que Jesús dejó a tu disposición para volverte como Él, una fuerza positiva de cambio en un mundo afligido. Vuestro éxito inyectará un grato soplo de aire fresco. Eventualmente, los reyes y reinas del drama de vuestra sociedad disfuncional se cansarán y mostrarán su resignación para aceptar de todo corazón la invitación extendida de Jesús de tomar parte en su aristocracia espiritual.”
Traducido por Oscar Escobar.