SER JUSTO ES SER MISERICORDIOSO
“La justicia divina es tan eternamente ecuánime que infaliblemente comprende una misericordiosa compasión.” [Libro de Urantia 1898:03]
Ajustador del Pensamiento:“¿Acaso no es alentadora la declaración anterior? Ciertamente, la Justicia Divina es misericordiosa. No podría ser de otra manera pues el Amor siempre es parte del modus operandi Divino –el Amor es la Fuente, el Amor es el Camino, y el Amor es el Eterno Destino.
“Obviamente, en vuestro planeta la justicia se dispensa de una manera que está lejos de emular a la Justicia Divina. Esto se debe a vuestra miope perspectiva humana. Ustedes son criaturas evolutivas y cada uno de ustedes es producto de vuestra evolución personal. ¿Qué quiero decir con eso?
“Estoy viendo más allá de la evolución planetaria de la especie. Estoy viendo la evolución espiritual individual que no sigue el mismo modo automático de vuestras envolturas carnales. Un feto se convertirá en un bebé; un bebé crecerá hasta su edad adulta a través de las etapas naturales de la infancia y la adolescencia. Vuestros cuerpos están programados para hacerlo sin mucha interferencia de vuestra parte. Sin embargo, son ustedes quienes deciden cómo manejar vuestro ser global. Ustedes se encuentran en el asiento del conductor en cuanto a cómo lo tratan –con respeto o falta de respeto. Esto traerá como resultado la salud o la enfermedad –física, emocional o mental.
“En lo que respecta a vuestra evolución espiritual, el viaje de cada vida es tan individual que solo el Padre y Sus Ayudantes tienen el derecho de emitir un ‘informe del progreso’ completo de este. Toman en consideración las desventajas del tiempo –como la genética, los factores ancestrales, la dinámica familiar y más–, y una multitud de factores que afectan el desarrollo de cada alma. Ninguno de ustedes comienza en el mismo lugar, nunca. Cada individuo tiene que lidiar con desventajas únicas. Lo que le importa al Padre es que ustedes progresen en la dirección correcta, aunque vuestro progreso pueda parecer caótico y sujeto a muchos reveses. El Padre no juzga vuestro libro de vida por su cubierta; lee el prefacio y los detalles finos y está completamente informado de su contenido y de la actitud que exhiben a medida que se mueven a través de vuestra vida planetaria.
“Un corazón amoroso es un corazón misericordioso, pues los padres amorosos siempre están dispuestos a perdonar a su descendencia los errores en sus caminos, ya que son parte de su proceso natural de crecimiento. Siempre hay una posibilidad para la reforma y rehabilitación. El perdón es lo que otorga el pase y permite otra oportunidad.
“Queridos, en lugar de juzgar rápidamente y con dureza a los demás cuando enfrenten sus deficiencias, deténganse y pregúntense cuáles son sus circunstancias atenuantes. Una vez que aprendan más acerca del viaje de su vida, desarrollarán compasión y empatía hacia ellos, pues tal vez les haya tocado el extremo de nacer ‘sub-privilegiados’, es decir, en circunstancias menos que ideales.
“¿Han sido amados y apreciados como merecen? ¿Han crecido sin la guía de sus padres? ¿Han tenido que asistir a la ‘escuela de los golpes duros’ desde el primer día? Es fácil para cada uno de ustedes hacer excusas por vuestros comportamientos menos que ideales; sin embargo, no utilizan los mismos estándares hacia los demás. ‘Tratar a los demás como les gustaría ser tratados’ también se aplica a esta área de la vida. No les corresponde juzgar a los demás, ya que obviamente no están calificados para hacerlo. ¿Cuántos errores judiciales han sido cometidos bajo el patrocinio de prejuicios y la ilusión de tener siempre la razón?
“A ustedes les corresponde guiarse amorosamente unos a otros como hermanos y hermanas mayores, conforme reconozcan lo que pueden hacer para ayudar a otros a ver lo que pueden remediar en sus vidas para avanzar espiritualmente.”
Traducido por Perla Téllez Garza.