LA SUBSTANCIA DEL AMOR
Portavoz:“‘Te amo’ son palabras dichas con tanta frecuencia en este planeta, son dos pequeñas palabras con un inmenso contenido. El amor es una energía, una sustancia energética, que impregna toda la creación. La capacidad de aprovechar esta sustancia es lo que permite que tu corazón se expanda como el amor. Debido a su propia naturaleza, no puede caber en espacios cerrados y apretados. El amor se asfixia cuando es monopolizado o retenido codiciosamente. El amor se multiplica cada vez que verdaderamente se comparte, pues al menos se requieren dos para amar. El amor no es una calle de un solo sentido, sino una avenida de dos vías –en realidad es más parecido a una rotonda. Lo que se da, regresa.
“Conforme enfocas tu vida cada vez más en la expresión de tu propio amor, este transformará a tu ser. El servicio es realmente la más elevada expresión del amor, su manifestación, su actualización. Si no se canaliza a través del servicio altruista, el amor no se empodera. El amor es un potencial que necesita ser activado y guiado por el Espíritu.
“Tu Maestro, Jesús, fue un brillante ejemplo de lo que es el verdadero amor, pues dedicó toda su vida al servicio elevado, en múltiples niveles: servicio al Padre, servicio a sus hermanos y familiares, servicio a los demás, incluso a los difíciles de amar. El amor no discrimina. Un corazón amoroso tan solo se extiende a todo y a todos, sin colocar barreras artificiales en su propio camino.
“No restrinjas tu capacidad de amar. No obstruyas tus canales de amor. Cuanto más permitas que el amor fluya a través de tu ser, más ampliarás tu capacidad para amar, para recibir amor y responder con amor. El amor es verdaderamente el sistema circulatorio de los universos. Esta es la razón por la cual la Unidad en la Diversidad es elmodus operandide los universos.
“Abraza la diversidad con amor y gratitud. Expresa tu propia singularidad con auto-respeto y dignidad. No te avergüences de ser quien eres. Eres único y precioso. Compararte a ti mismo con los demás no te ayudará a abrazar tus propios regalos únicos dados por Dios. Apoya a los demás en su propia expresión. Los regalos del Padre tienen el propósito de ser compartidos y apreciados por todos.”
Traducido por Perla Téllez Garza.