SOBRE LA LUMINOSIDAD REVELADORA DE LA ILUMINACIÓN.
“Cuanto más completamente se comprenda el hombre a sí mismo y aprecie los valores de personalidad de sus semejantes, tanto más anhelará conocer la Personalidad Original, y tanto más sinceramente luchará ese ser humano que conoce a Dios por llegar a ser como la Personalidad Original.” [LU 1:6:6].
Ajustador del Pensamiento: “Dos pensamientos entraron en tu mente al leer la declaración anterior: 1) El Dios Infinito revela Su Personalidad Original a través de las dotes de personalidad única de Sus criaturas. ¿De qué otra manera el Infinito podría reflejarse en Su creación finita? 2. La personalidad de Dios es todo acerca de los valores, no la falta de ellos.
“Por lo tanto, puedes deducir que todos los indicios de verdad, belleza y bondad que tú detectas en tu interior, o en tus semejantes, son dotes de personalidad eternas. Cualquier cosa falsa, malvada y fea, tienen fecha de caducidad, ya que es insostenible, siendo cortada la savia espiritual vivificante del Árbol de la Vida.
“La malvada toma de posesión de Lucifer propagó la desinformación. Las cosas fueron cuesta abajo a partir de ahí, ya que las mentiras producen maldad y fealdad de carácter. Por lo tanto, para encontrar vuestro camino de regreso a las sublimes dotes de personalidad de su Progenitor Divino, necesitan desviar su atención de las áreas de sombra confusas arrojadas por la iniquidad, tanto en sus corazones como en sus mentes.
“Dios es pura Luminiscencia. Tal como la llama de una cerilla carece de sombra, así es Su Personalidad. Es otra razón por la cual “La luminosidad espiritual de la presencia personal del Padre es una «luz a la que ningún mortal se puede acercar; la que ninguna criatura material ha visto jamás ni podrá ver» [LU 1:3:3]
“A medida que las criaturas crecen en autodominio hacia la auto perfección, ellos se vuelven más luminosos. Eventualmente, ellos serán completamente compatibles con la Luminosidad Divina, cuyo Seno de Luz y Vida ejerce una irresistible fuerza de atracción. Los sentimientos de felicidad duradera y abrumadora que experimentarás a tu ‘Regreso a Casa’, están muy lejos de lo que tú experimentas en momentos fugaces de Gracia.”
Traducido por Silvia Adriana Cohane.